¿HACES LO RECTO ANTE LOS OJOS DE DIOS?
Lea: 2 Reyes 20-23
ABRIL
DIA 27
En 2 Reyes 20, a Ezequías, Dios le añade quince
años, pues, oyó su oración sincera y miró sus lágrimas. Y Dios lo sana
por medio de un elemento natural, la masa de higos. Cuando uno está
enfermo, debe ir primero al Señor, orar para que sea haga su voluntad.
Pedir con fe que él lo sane. Mateo 21:22 dice: “Y todo lo que pidáis en
oración, creyendo, lo recibiréis” Y Dios sana. Pero, otras veces, hay
que confesar el pecado. Santiago 5:16 dice: “Confesaos vuestras ofensas
unos a otros y orad unos por otros, para que seáis sanados”.
Luego en 2 R.21, Manasés, fue un rey malo de Judá, adoró a Baal,
sacrificó por fuego a su hijo y practicó la adivinación y sus
derivados. Para colmo, él derramó sangre inocente. Dios tuvo que
castigar el mal. Luego que muere, su hijo Amón toma el poder y siguió
el mismo camino que su padre y adoró a los ídolos, dejando a Dios;
murió en manos de sus siervos que conspiraron contra él.
“Hizo lo recto ante los ojos de Jehová y anduvo en todo el camino de
David, su padre, sin apartarse a derecha ni a izquierda” 2 Reyes 22:2
Josías, “a quien Dios sana”, este rey de Judá, fue coronado por el
pueblo a los ocho años de edad. Los libros de Reyes y Crónicas
concuerdan en señalar a Josías como él más recto de los reyes de Judá,
debido a que pudo conquistar rápidamente las antiguas provincias del
norte y liberarse del tutelaje de los asirios. Extendió las fronteras
de su reino hasta el límite del reino unido; según Vila.
Ezequías y Josías, tuvieron jerarquía, y aprendemos: Uno, a confiar
en el Señor, en las crisis; dos, el líder malo, hace daño y tres, el
líder bueno hace caso a la Palabra de Dios; he ahí la diferencia, para
agradar a Dios.
En 2 R.23 El rey Josías, tuvo la valentía de, sacar del templo todos
los utensilios para Baal. Quitó los sacerdotes idolatras. Sacó la
imagen de Asera; derribó los lugares de prostitución idolátrica. Hizo
venir a los sacerdotes de Judá. Profanó los lugares altos; derribó los
altares. Prohibió que no pasarán por fuego a los hijos. Quemó los
carros que daban culto al sol.
Quitó los templos altos y celebró la
Pascua a Jehová. Posteriormente muere Josías y lo sepultan en
Jerusalén. Surge otro rey, Joacaz, “Hizo lo que ofende al Señor”; fue
llevado preso en Ribla para que no reinara, y el faraón Necao colocó
como rey, a Eliaquim, hijo de Josías, al que le puso otro nombre, el de
Joacim; éste impuso impuesto duro al pueblo para pagar tributo al
faraón Necao. Ora por este Ministerio.
ORE:
Padre, guíame a hacer lo recto ante tus ojos, al dar tiempo a solas para ti y para mí...
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