mayo 07, 2010

CRONICA ROJA

CRÓNICA ROJA

MAYO
DIA 07
Lea: 2 Crónicas 21-24
Meditemos en está crónica violenta, para evitar pecar y, adorar a Dios.
¿Qué hizo Joram, para que la gente no lo quiera? "Mató a espada a todos sus hermanos y también a algunos príncipes de Israel" Se casó con la hija de Jezabel la malvada y además "hizo lo malo ante los ojos de Jehová". Fue un idólatra e "incitó a los habitantes de Jerusalén a la prostitución". Elías el profeta en una carta le advierte del castigo que le enviaría Jehová; pero no le hace caso. Joram, hijo del rey Josafat, murió sin honor alguno.
En 2 Cr.22, El rey Ocozías, en vez de buscar a Dios, buscó su propia ruina. Ocozías rey de Judá, fue hijo de Joram, y su madre fue Atalía. El presente rey "hizo lo malo ante los ojos de Jehová, como la casa de Acab" Tuvo una mala madre con malos consejeros. Atalía lo aconsejo para que actuara impíamente. Jehú que había sido ungido por Jehová para exterminar a la familia de Acab, buscó y encontró a Ocozías y, lo mataron. Luego surge la usurpadora Atalía quien "exterminó a toda la descendencia real de Judá".
En 2 Cr.23, Joida "Dios conoce". Fue sacerdote en tiempos de Ocozías, Atalía y Joás, reyes de Judá. Su esposa Josabet, hija del rey Joram, salvó al niño Joás, hijo de Ocozías, cuando Atalía la reina madre intentó asesinar a todos los herederos al trono. Joiada lo mantuvo escondido en el Templo durante seis años, después de los cuales lo proclamó rey. Joiada fue el regente de Joás, e incitó un avivamiento religioso, destruyó los altares de Baal y restauro el Templo. (Vila DBI 1981)
Ahora leemos, "Mientras el sacerdote Joyadá vivió. Joás hizo lo que agradaba al Señor" (2 Crónicas 24:2) Joás, fue protegido desde niño, el sacerdote Joida lo guió en la ley de Dios. Joás restauró la casa de Dios. Joiada muere y el rey Joás abandona la casa de Dios y adora a ídolos; la ira de Dios se hace presente por este pecado. Ahora vemos intrigas, deslealtad, violencia. Cuanto añoramos tu Venida Señor.
Ore por este Ministerio, para edificar vidas en el poder de Cristo.
OREMOS:
Padre, líbrame de pecar contra ti; quiero adorarte y servirte ya.




¡Feliz Día de la Madre!

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